Respiro. Organizo. Me equivoco. Aprendo. Sigo.
Este es una matra que me gusta repetirme a mí misma cuando siento que se me acumulan los pendientes o no estoy entendiendo bien cómo manejar cierta situación o materia. El hecho de llevar una carrera universitaria no solo se basa en mantener buenas notas y avanzar al siguiente curso, sino también es entender realmente que es lo que estamos estudiando, mientras que, a su vez, sobrellevamos la cotidianidad del diario vivir por aparte.
Por ejemplo, a mí me gusta aprovechar un tiempo algunas noches, para realizar una pausa activa, y así poder dedicarle espacio a mis hobbies, como lo son pintar en acrílico, escribir o ver alguna película. Ese rato de esparcimiento me ayuda a liberarme un momento de los pendientes que acarrean el día y despejarme en algo en lo que me gusta invertir mi tiempo.
Actualmente soy Lic. en Contaduría Pública y recientemente estoy cursando mi segunda carrera en Ingeniería Civil y en mi proceso continúo aprendiendo, por esto te quiero compartir lo que me ha ayudado a seguir adelante. A continuación, te dejo algunos consejos que he aprendido durante mi travesía como estudiante universitaria.
Estrategias de Estudio Realistas
Empieza a repasar desde la semana 1, aunque suene muy pronto, te ayudará a llevar un control de lo que se vaya estudiando, de paso vas priorizando la información importante conforme avancen las clases y así, reconoces que forma de estudio se te hace más efectiva, como por ejemplo si se te facilita trabajar mejor con videos, apuntes, hablándote en voz alta o hacia alguien).
Cada mente funciona diferente, la idea es que te conozcas y adaptes de la mejor manera.
Hablar sobre evitar la autoexigencia extrema
Ser exigentes con nosotros mismos no es negativo, pero cuando lo empiezas a ver como una carga constante, este factor deja de impulsarte y te comienza a agobiar. Reconocer tus puntos fuertes y débiles habla más sobre la claridad que quisieras mantener en tu vida, hablando en un aspecto general, como por ejemplo para buscar estrategias que te ayuden a mejorar en la salud o formas de aprendizaje, en lugar de compararte o exigirte más allá de lo sano.
La meta es ser consistentes durante el proceso.
Tejer redes para no colapsar
Aprender durante el camino universitario a construir redes de apoyo, ya sean emocionales, académicas o personales. El verdadero éxito de solicitar ayuda también es parte de ser responsables con nosotros mismos.
A veces una buena conversación, o un mensaje solicitando ayuda pueden ser el salvavidas de un trabajo.
Recuerda que no estamos solos, y aprender a buscar apoyo en los otros compañeros es una forma de ser responsables.
Conclusión
Sobrevivir a la universidad no se trata de mantener todo bajo control, sino, de verlo como aprender a caminar con lo que tenemos, a equivocarnos durante el proceso, no juzgarnos ni juzgar, si puedo ayudar lo hago con gusto, que al final las recompensas nacerán de los frutos que sembramos durante todas estas semanas que con el tiempo se convertirán en años de experiencias y vivencias diversas.
Estudiar también es un proceso humano, abrázate y confía en el proceso, el simple hecho de estar aquí hoy ya es un logro muy grande para la persona en tu interior que alguna vez soñó con ello.
Quiero agradecer la oportunidad de compartir este ensayo escrito con dedicación e ilusión, me alegra compartir un pedacito de mí a través de mis palabras.
Con aprecio, Heylen Araya Madrigal.
